PANTALLA PUBLICITARIA Y DIÁLOGO URBANO
Paseaba por una céntrica calle madrileña y se me apareció una pantalla publicitaria de una conocida marca de sanitarios. Era como una película con personajes y escenas tan reales como la vida misma. Me compré una bolsa de pipas y me senté en un banco que tenía justo enfrente de la pantalla. Pronto se me añadió el conserje del edificio de al lado y una señora de la zona que no tenía prisa. Nos ofrecimos un resumen filosófico de la vida y el barrio. Hablamos de política, corrupción, paro, falta de opciones en general, familia, hijos…mientras comíamos pipas y seguíamos las imágenes proyectadas por la pantalla. Fue un rato muy agradable, que me gané, por no quedarme encerrado en casa quejándome de todo.
Publicado el enero 29, 2015 en Artículos Propios y etiquetado en charlas en la calle, pantalla urbana. Guarda el enlace permanente. 11 comentarios.

Salir y compartir el tiempo con otros siempre es gratificante. Por cierto, te traje un poco de aire puro ¿lo quieres para este mes o para el próximo? No creo que caduque…
Lo antes posible, seguro que me regenera. Y me estaba haciendo falta. Wellcome. Saludos
Es que no puede una persona quedarse encerrada en una ciudad como Madrid.
Un saludo desde Argentina.
Bien cierto, el mejor patrimonio de Madrid es la vida en sus calles. Saludos
A veces nos perdemos grandes momentos por no querer ver más allá de las cuatro paredes de nuestra casa. 🙂
Hay que mirar mucho, claro, interior y exteriormente. Tenemos que ampliar nuestra visión. Saludos
conozco la gran pantalla de la calle,donde ves como se asea el personal…es muy bonita..per lo mas bonito es ver como la gente pasa y no la ve….van con prisa..para llegar a ningin sitio.
Buena filosofía. La vida hay que vivirla en cámara lenta muchas veces. Abrazos
Madrid nunca perderá su magia por mucho que la maltraten. Abrazos.
Así me gustan las castizas. Claro que no. Abrazos
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