SOBRADO DE LOS MONJES: BELLEZA, QUIETUD Y SILENCIO
Una forma diferente de buscar quietud y silencio, es decir, relajo lejos de la jungla de asfalto, es refugiarse en los diferentes monasterios que pueblan nuestra geografía. Sobrado de los Monjes es uno de mis rincones favoritos: naturaleza, costumbres monacales, mínimamente apartado de todo pero sin estar lejos de nada, cobertura deficiente, perfecta, para justificarse ante los demás y lo mejor de todo: se puede trabajar a gusto y con plena tranquilidad. Es el mejor lugar para pasear y escribir. Si en alguna ocasión no me localizáis perderos por aquí y me encontraréis en alguna de las “celdas” disponibles. Eso sí, los muy nerviosos y los drogodependientes de la jarana y los tubos de escape, abstenerse, el Hospital Comarcal pilla apartado y el camino es muy sinuoso. Por cierto, si os apetece seguir leyendo os remito al siguiente enlace
Publicado el septiembre 8, 2014 en Piezas/Lugares y etiquetado en manuel villa-mabela, Monasterios, Sobrado de los MOnjes. Guarda el enlace permanente. 2 comentarios.
Q dos fotos tan bonitas!!!
Pues en directo mejor. Anímate y escápate alguna vez. Saludos