CASTILLO PARADOR DE SIGÜENZA
Guadalajara ofrece al viajero distintas arquitecturas, castillos, tradiciones y paisaje, que no están, suficientemente, divulgados y asumidos. Por ello mismo es una continua sorpresa para quien de forma fortuita se acerca por sus dominios. Conozco desde hace mucho Sigüenza y nunca dejo de disfrutar las estampas que me ofrecen desde cualquier rincón, tanto su catedral como su castillo. Son dos joyas que brindan a la ciudad de personalidad propia y singular. El castillo de los Obispos de Sigüenza es un palacio-fortaleza levantado en el siglo XII. Ha sufrido diferentes destrucciones y otras tantas reformas. Actualmente luce como miembro de la Red de Paradores y solo el turisteo al por mayor le sacude sus esencias de tanto en tanto, pero, la verdad es que merece visita, disfrute y…se suele volver con toda la frecuencia posible. Es decir, recomendado de todas, todas. ¡¡Feliz viaje!!
Publicado el mayo 4, 2016 en Viajes y etiquetado en Castillo Parador de Sigüenza. Guarda el enlace permanente. 12 comentarios.
Un sitio mágico y muy evocador… ¡Me encantaría visitarlo!
Gracias por compartir 🙂
Te esperamos con los brazos abiertos, saludos
¡Gracias por la bienvenida! Y aquí va otra «coincidencia», ¿habrás leído a Gabriel Miró?
¡Feliz fin de semana!
El obispo leproso, corpus y cuentos. Hay que leer y leer. Feliz fin de semana. Abrazotes Sara
Pues ese no lo había leído. (Lo acabo de conseguir). En realidad me refería a «El libro de Sigüenza», un librito delicioso del que siempre recuerdo (entre otros) a un personaje que me habría encantado ver en una obra de teatro: Doña Patrocinio … No digo más por si se te antoja leerlo.
Besotes y feliz noche de domingo, amigo!
Pues no lo he leido, queda apuntado y este verano cae. Gracias. Feliz semana, besotes
Gracias por la recomendación. Algún día me perderé por allí, porque seguro que me encanta. ¡Un saludo!
Pienso que vale la pena y Sigüenza en sí es agradable y pintoresca. Feliz viaje para cuando toque. Saludos
Me encanta 🙂
Pssshhh…no está mal. Bueno, a mí también me encanta. Saludos
Cierto. Conozco Sigüenza y su parador, tuve la suerte de pasar unos días allí con motivo de unas jornadas de recursos humanos organizadas por la empresa en la que trabajaba por entonces. Disfruté de una cena medieval, con música y atuendos del personal de hostelería fieles a la época.
Eso es cuidar al cliente. Es un sitio muy especial, si que es verdad. Feliz semana. Saludos