PRESENTE E HISTORIA DE LAS CORRALAS MADRILEÑAS
Arquitecturas tradicionales nacidas en los tiempos de Felipe II, precisamente, para paliar la falta de espacio urbano en los madriles de antaño, hoy vuelven a tener vigencia para los bolsillos más modestos y los temperamentos más bohemios. No hay un censo preciso, pero se cree que podrían superar las cuatrocientas, repartidas, sobre todo, en Lavapiés, Embajadores y La latina, aunque, bien buscadas, las hay en todas las zonas. La que acompaña esta “entrada” ,por ejemplo, está en Chamberí. Estas viviendas-corredores con patios interiores, populares en las novelas de Galdós y la vida castiza de fiestas y limonadas, son ahora mismo un atractivo como vivienda, tanto por su ubicación en zonas céntricas como por su singularidad. Son pequeñas, diminutas, cierto, pero su historia y sus posibilidades, muy grandes.
Publicado el febrero 7, 2017 en Piezas/Lugares y etiquetado en Arquitecturas tradicionales, Corralas de Madrid, manuel villa-mabela. Guarda el enlace permanente. 2 comentarios.
La modernidad hace que cada vez haya menos corralas, algunas se convierten en hoteles pequeños, otras en nuevas viviendas conservando su idiosincracia o en pequeños centros de comerciales. La idea de conservarlas me gusta, porque nos recuerda otra forma de vivir, Un cordial saludo
Tienen su futuro, no maravilloso, pero se van haciendo un hueco. Saludos mil