EL HOSPITAL Y EL SUEÑO DEL MAGO
Edificio de apariencia funcional, acabado poco ceremonioso, ubicación práctica, podría ser muchas cosas y confundirse con otras tantas, pero es un hospital y detrás de cada ventanal se encuentra el escenario de muchas vidas que barajan salud, destino y objetivos. Es curioso, los coches siguen circulando, hay ruidos vitales alrededor y en la cafetería del hospital se debaten toda suerte de conversaciones, que nada tienen que ver con los dramas que se representan en las habitaciones cerradas y firmadas con un número. Cuando sea mayor me convertiré en mago para visitar, una a una, todas las habitaciones tristes, sobre todo, las que no reciben visitas. Cuando sea un mago inundaré de magia todos esos universos descatalogados de la felicidad.
Publicado el octubre 13, 2016 en Artículos Propios y etiquetado en Hospital y el sueño del mago, manuel villa-mabela. Guarda el enlace permanente. 23 comentarios.
Hola Gorrióndeasfalto, cuán ciertas son tus palabras, estar en un hospital y no recibir visitas es duro, triste y no ayuda mucho a la recuperación.
Cuando yo estuve en el hospital 2 veces el año pasado, la primera vez sólo me visitaba mi hijo, me sentía muy sola. La segunda, en otro hospital, mis «magas» eran las enfermeras, hacían corro en mi habitación, casi siempre había 2 ó más haciendo plática, bromas, riendo, salí más pronto y ya totalmente bien de ahí, no he tenido que regresar, como en la vez anterior.
Leyéndote me doy cuenta que esas «visitas» de las mismas enfermeras me ayudaron mucho a sanar más pronto.
Ojalá sí hagan ese grupo visitador.
Abrazos de luz
La verdad es que si solo dedicaramos una hora cada uno en echar un cable a alguien cercano o medio cercano, todo podría cambiar radicalmente. Abrazotes
Muy cierto, será bueno empezar a hacerlo ¡ya!
Abrazo de luz
Es feo ver las numerosas visitas en las camas cercanas y estar solo.
Una de las más tristes experiencias.
Un abrazo.
Creación ya de voluntarios para hacer visitas. Si, es triste. Abrazos
La magia está en tu corazón. Saludos
Muy lindo comentario. Saludos
¡Verdad!, cuántas personas viviendo en soledad en el hospital, o en sus casas sin una mano amiga que les de un poco de compañia. Aunque tambien tengo que reconocer que hay muchos magos, quizás no los suficientes que dedican tiempo para visitar a los que no tienen quien los visite. Muy bonita la entrada. Un cordial saludo
Gracias. Pues sí, hay muchos, pero nunca los suficientes. Y sigo creyendo, ingenuo de mí, que haciendo un poco cada uno, no demasiado, se podrían mejorar las cosas, por lo menos alrededor cercano y próximo,pero bueno…esa tal vez es ya otra historia. Abrazotes
Avísame cuando vayas! es una lástima pero, es la pura realidad. Hay personas que están muy solas y a veces, aunque sea en un hospital, se sienten acompañadas. Saludos.
Cualquier día formamos un grupo visitador, «magos en acción». Gracias. Saludos
jajajaja!!! Ok! 🙂
En la habitación de hospital, mejor un mago que un payaso , que dan grima 🙂
Todos para dentro, hombre, como en el camarote de los Marx. Siempre sumar. Saludos
Muy generosas tus palabras, Manuel. Buen fin de semana.
Feliz fin de semana para tí también. Abrazotes
Me gusta esto que has dicho hoy. Un abrazo.
Si tú lo apruebas es que medio he acertado en algo, seguro. Abrazotes
Por supuesto que lo apruebo. Hay muchas cosas que podemos hacer por los que están en peor condición. Me gusta que seas así.
Triste pero cierto. Hay mucha gente muy enferma y que no tienen a nadie que los visite.
Te felicito por el texto y por tus sentimientos.
Un abrazo.
Gracias a tí por comentar, creo que los sentimientos están en todos, pero ponemos pocas cosas en práctica de las muchas que pensamos. Abrazos
Espero que cuando seas mago me visites..👏
Eso está hecho, de momento, estamos en comunicación. Saludos