SERIE POESÍA PERFORMANCE: LENGUAJES SIMBÓLICOS
Pocas cosas hay más placenteras y gratificantes que una buena conversación. Aunque sea tan solo preguntarle a un señor en el ascensor: ¿A qué piso?
Él me entiende y me contesta. Y quien sabe si me añade: Voy al octavo, por cierto, soy poeta. Y nos pasamos recitándonos versos hasta la planta octava. Claro que las lenguas no siempre acercan, una pena pero….Ay, aquéllos tiempos en los que gobernaban los símbolos. Me gustaría mucho que un político escribiera o dibujara en una pizarra las cuatro tonterías que quiere prometer y no volviera a decir esta boca es mía en toda la legislatura. Ay, aquéllos tiempos plenos de relatos pétreos. Hablaban las esculturas, las pinturas, los frisos, los bajorrelieves, los símbolos. Otros tiempos, claro, otros lenguajes. Y yo sigo aquí buscando una plaza para aparcar ¡UNA LIMOSNA PARA MI PACIENCIA! Voy a dibujar paciente sobre todas las carrocerías de los coches aparcados lo que siento en éstos momentos trágicos. Quiero establecer una nueva comunicación. Otro lenguaje lleno de símbolos.
Y si te apetece seguir leyendo hasta otra planta del ascensor te recomiendo el siguiente enlace
Publicado el octubre 1, 2014 en Cosecha Propia y etiquetado en escritura críptica, Lenguaje y símbolos. Guarda el enlace permanente. 2 comentarios.

Hasta el piso 130 hablaríamos y me fascinaría…
Bueno, bueno….